martes, 8 de mayo de 2012

Siempre Querer Más

No esta mal desear siempre más y más, siempre que vaya acompañado de valores.  Tal vez este pequeño relato nos ayude a comprender esta frase:  Un pobre mendigo se había acostumbrado a mal vivir con lo poco que le daban.  Aunque no era viejo y estaba sano, no aceptaba ningún trabajo que le ofrecían y así iba de un lado a otro sobreviviendo como podía.  Un día se encontró con un amigo de la infancia y ambos se pusieron a recordar viejos tiempos.
- ¿A ti qué tal te ha ido? - preguntó el amigo al mendigo.
- Muy mal - respondió -, ya ves, he tenido muy mala suerte y mi situación es lastimosa.
- Pues, mira - repuso el amigo -, yo he descubierto que tengo poderes sobrenaturales y creo que puedo ayudarte.   
Dicho esto, tocó con su dedo índice un ladrillo y lo convirtió en oro.
- Para ti - le dijo generosamente -, esto, sin duda, aliviará muchas de tus necesidades.
- Sí - contestó el mendigo -, pero la vida es tan larga y pueden ocurrir tantas cosas.....
El amigo volvió a tocar con su dedo una gran piedra y la convirtió en oro.
- También es para ti, ahora ya jamás tendrás problemas de dinero, ¡eres rico! - dijo el amigo.
- Bueno, está bien, pero la vida es muy larga... suceden tantas cosas, tantos imprevistos, según tienes más cosas aparecen más necesidades... en fin, hay "vicisitudes"...
- ¡Pero bueno! ¿Qué más quieres? - le dijo el amigo.
El mendigo respondió:
- Quiero tu dedo.

Hasta la próxima...

martes, 1 de mayo de 2012

El Trabajo del Ermitaño...

Un viejo ermitaño, se refugiaba en la montaña para dedicarse a meditar y hacer penitencia.
Un día un viajero le preguntó: "¿Cómo puede tener tanto trabajo si vive en soledad?".
El contestó: "Tengo que entrenar a dos halcones, a dos águilas, tranquilizar a dos conejos, disciplinar a una serpiente, motivar a un asno y domar a un león".
"No veo ningún animal por aquí, ¿dónde están?", contestó el viajero.
El ermitaño le dijo:

"Estos animales que te mencionado, los llevamos todos dentro.
Los dos halcones, se lanzan sobre todo lo que se les presenta, bueno o malo, tengo que entrenarlos para que se lancen sobre cosas buenas:  Son mis ojos.

Las dos águilas con sus garras hieren y destrozan, tengo que entrenarlas para que se pongan al servicio y ayuden sin hacer daño:  Son mis manos.

Los conejos quieren ir donde ellos quieran, quieren esquivar las situaciones difíciles, tengo que enseñarles a estar tranquilos aunque haya sufrimiento, problema o cualquier cosa que no me gusta: Son mis pies.

Los más difícil es vigilar a la serpiente, está encerrada en una fuerte jaula, pero ella siempre está lista para morder y envenenar a cualquiera que esté cerca, por ello tengo que disciplinarla: Es mi lengua.

El burro es obstinado, no quiere cumplir con su deber, siempre está cansado y se niega a llevar carga cada día: Es mi cuerpo.

Por último necesito domar al león, quiere ser el rey, el primero, el vanidoso, el orgulloso, se cree el mejor: Es mi EGO.

Como vé tengo demasiado trabajo por hacer."

Hasta la próxima...